Hace unas semanas nos encontramos con la siguiente noticia, en la misma, preguntado un niño de sobre si en su escuela hay extranjeros, el mismo comenta que "no, solo hay niños"
Los niños/as pequeños no están mediatizados todavía por las intransigencias y paradigmas que nos vienen dados por el hecho cultural al que pertenecemos.
Somos los adultos, con nuestros prejuicios ya adquiridos, los que mediatizamos a nuestros pequeños, y tristemente, lo hacemos la mayoría de las veces negativamente.
En nuestro colegio, tenemos una población escolar con algunos alumnos/as de etnia gitana, y también con población de origen extranjero. Los niños cuando vienen al colegio no se distinguen entre ellos por esta razón, ellos no ven más allá que niños y niñas, esa es la única distinción que hacen , ni siquiera se percatan de la diferencia racial. Si no hacen ninguna referencia al origen ni a la pertenencia de una persona a un grupo social, ¿por qué más tarde, sí que la hacen?.
Es la sociedad en la que estos niños viven, la que les inculca estos valores, muchas veces incluso,contra el trabajo que se realiza en los centros escolares.
Por esta razón, estamos muy orgullosos del trabajo que realizamos en este centro en el que la integración, la cohesión y la cooperación entre todos, independientemente de su origen, religión, sexo o raza, es lo que nos marca el camino a seguir, apostando diariamente por una auténtica EDUCACIÓN PÚBLICA.